Resumen:
En la universidad, los grupos son un importante espacio de crecimiento. A pesar de ello, las investigaciones que lo tratan son insuficientes. En Cuba, su atención se ha organizado desde los proyectos educativos de brigada, herramienta que coordina la orientación educativa para estimular el proyecto de grupo como categoría reguladora del comportamiento. Esta relación práctica no siempre es eficiente, aspecto que en la Universidad de Sancti Spíritus llevó a proponer la construcción de un modelo educativo para estimular el desarrollo del proyecto de grupo desde la orientación del proyecto educativo de brigada en los estudiantes universitarios. La investigación transcurrió en tres momentos, uno de construcción teórica, uno de diagnóstico y proyección y otro de evaluación. El modelo aportado consta de cuatro fases: reconocimiento, concertación, integración primaria y congruencia, con metas parciales en el ciclo de formación que aportan elementos metodológicos integrales bajo la coordinación del colectivo tutoral. En su evaluación, los expertos coincidieron en su pertinencia y aplicabilidad. Su ementación en un caso tipo mostró positivos resultados en el cumplimiento de sus objetivos, con un mayor desarrollo individual, del colectivo y su proyección. Este aspecto, le confirió un alto valor práctico y teórico que se sintetiza en el informe escrito.