Resumen:
La mitología griega está poblada de dioses con virtudes y debilidades humanas, correlatos entre unos y otros, como expresión poética de la imaginería popular.
Las parcas, entes mitológicos, responden a los nombres de Láquesis, Cloto y Átropos; no tienen en los mitos helenos una naturaleza bien definida, ora pueden ser consideradas como diosas, ora no son más que la personificación del destino o hado, a que todo ser humano está sujeto.
Correspondía a cada una de ellas tirar de los hilos de la vida de los mortales: Láquesis, hilaba el estambre; Cloto, lo devanaba y Átropos, lo cortaba, con pespuntes terminales.
Así, ni más ni menos, despejadas las brumas de mitos y leyendas, discurren las vidas de los ciudadanos de cualquier país del planeta; solo que ahora los hilos sociales son tensados y trenzados por disposiciones normativas dictadas por la organización política de la sociedad que, desde antes del nacimiento y hasta después de la muerte, tiran de las personas naturales, doquiera se encuentren y cuanto vivan.
La palabra anécdota, por cierto, de origen griego, significa, sin mucho rebuscamiento, relación de un hecho curioso, más o menos notable, del que se puede extraer alguna enseñanza, sin llegar a ser moral, aunque pudiera serlo.
Mi Anecdotario Jurídico pretende enhebrar hilos de vidas de cubanas y cubanos coetáneos, en la urdimbre del estambre normativo doméstico, quizás inverosímiles aquellas, pero probables; ello a manera de cortes y costuras legales y culturales, tirando de sus retorcidas cuerdas que zurcen nuestro hado cotidia